Debe su nombre a la aparición de la Virgen dentro del tronco de un nogal. A este santuario acuden en romería trece pueblos del Sobrarbe. Aunque su origen parece ser románico, la mayor parte de la construcción es de los ss. XVI al XVIII.
Una amalgama de edificaciones de diferentes épocas conforman el Santuario: la iglesia, varios casales o salas de romeros (donde se reunían los pueblos asistentes y recibían el nombre de los santos venerados en ellos), cuadras, bodega y el camposanto. El conjunto presenta planta irregular distribuida en torno a un patio al que se accede por un zaguán.
La iglesia es de planta longitudinal, con una nave cubierta por bóveda de cañón. Tiene cabecera recta y se cubre con una cúpula sobre pechinas. La decoración es barroca de carácter popular. En la clave del arco aparece la Coronación de la Virgen, y en la cúpula los cuatro Evangelistas.
La puerta exterior se abre bajo arco de medio punto en cuya clave hay grabada una cruz de Lorena fechada en 1552. Algunas ventana están decoradas con rostros en altorrelieve y sogueado en el alféizar.